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bazofia.com.ve

De cómo un internauta le hala las orejas a los responsables de su frustrachera, uno por uno.

Allá en el siglo 20

Cuando en 1990 Tim Berners-Lee parió la telaraña mundial (www), él sólo quería hallar una forma eficiente de difundir información científica entre sus colegas del CERN en Suiza. No se imaginaba que 24 años después, miles de kilómetros al suroeste de Génova, un ejército de aspirantes a toderos administradores (webmasters) y diseñadores gráficos que no tienen ni de lo uno ni de lo otro, intentarían armar en internet unos bodrios que representarían a ciertas empresas en su suramericano país.

Pero, de la misma forma que no podemos culpar al inventor de la dinamita por los desmanes que esta pueda causar, dejemos tranquilos a Alfred Nobel y al pobre de Tim y ensañémonos contra el que (ab)usa de la dinamita; o mejor, contra el que viola el buen gusto, obvia normas de sentido común, y hace perder tiempo en internet.

Los pioneros en la crítica de la e-bazofia criolla

Hace mucho tiempo atrás, existía barranco.com, un sitio venezolano que se dedicaba a criticar con la peor saña pero con la mejor de las intenciones, los desaciertos de los sitios web de empresas comerciales venezolanas. De dicho sitio no queda nada, excepto lo que se puede encontrar en The Internet Archive, especialmente aquí y aquí. En barranco.com hacían bien su trabajo porque, en el peor de los casos, quedaban señalados todos aquellos contraejemplos de normas de diseño de páginas y portales; y en el mejor de los casos servía como retroalimentación a todos aquellos administradores que creeían que se la estaban comiendo con sus diseños cutres, y recapacitaban para mejorar en algo sus productos.

Al grano

Después de leer los comentarios que se pueden encontrar en barranco.com, que datan de hace más de 5 años, se puede ver que en algunos casos la situación no ha mejorado. Y tomemos un ejemplo emblemático de tan lamentable situación: el sitio de la telefónica móvil Digitel TIM .

Luego de pasar por una página de supuesta validación en que se comprueba si se tiene Macromedia Player e Internet Explorer o Netscape y (ajá, ¿y los que usan Opera, Firefox o algún otro navegador?) aparece la página principal en donde la presentación tiene un diseño que quiere parecer bonito, metiendo Flash en todo. Es un horror vacui, un temor a los espacios vacíos en el diseño de la página, una antítesis al mimalismo. Por supuesto, el tiempo de descarga de esos caprichos artísticos es mayor comparado al simple, eficiente y nunca bien ponderado hipertexto HTML. Y si hay algo peor que ver un mal diseño, es esperar tiempo de más para verlo. Por otro lado, a partir de la página principal no se puede ver la barra de dirección del URL, lo que significa que no se puede enlazar a ninguna página del sitio. Es decir, se niega a la cualidad interlazada de la internet.

Por otro lado, lo que le sobra en diseño rebuscado, falta en organización, cantidad y calidad de contenido. Si alguien visita el portal de una empresa de telefonía celular, sea o no cliente de la misma, lo más probable es que esté buscando información sobre tarifas, promociones, equipos, soporte técnico, dirección de oficinas, etc. El sitio en internet de este tipo de compañías (como los de la mayoría de las compañías prestadoras de servicios) debe ser una extensión de todos los servicios que ofrece através de sus oficinas y números de atención al cliente. Pues bien, toda esa información podría estar o no en digiteltim.com.ve, pero la forma en como está organizada hace lento y complicado su acceso, hastiando al usuario, y haciendo que este opte por recurrir a los números de atención cliente o las oficinas, robándole tiempo tanto al mismo usuario como el sueldo de los empleados de estos sitos. Es decir, una situación en donde todos pierden.

Valga aclarar que todo esto no constituye una crítica a la compañía Digitel TIM en sí. De hecho, este crítico opina que es un excelente prestador de servicios, y es precisamente esa excelencia la que uno extraña al visitar la cara que ofrece en internet.

¡Hay una esperanza!

Para hacer una comparación constructiva, vale la pena pasarse por el sitio de Movilnet. Tiempo atrás éste último adolecía de males parecidos al de Digitel TIM, pero luego de un rediseño que se podría calificar de ambicioso, el sitio de Movilnet ofrece una cara fresca, sencilla, nada sobrecargada. Tiene un sitio en el cual se puede buscar abundante información relacionada a la compañía y sus servicios, usando enlaces organizados de forma jerárquica, o bien usando su propio motor de búsqueda. Y además, toda esta información está actualizada. No se encontrará ahí tarifas vencidas desde hace años o promociones ya inexistentes. El sitio ciertamente no es perfecto, tiene ciertas fallas cosméticas; pero es un excelente ejemplo a imitar.

Así que, señores de Digitel TIM, muevan ese código, pónganle trabajo al sitio, y no teman meterle dinero. Pero asesórense bien. Vean ejemplos prácticos y eficientes. Pongan a valer ese sitio web. Ya verán que el esfuerzo dará sus frutos.

2004-07-13@23:54

¡GUERRA!

¡GUERRA! el que dijo que la guerra de los navegadores había terminado, es porque está demasiado hipermétrope para no poder ver algo distinto a IE. opciones hay para quien quiera.

a título personal, estoy enamorado de Opera. tiene muchas opciones que encuentro realmente útiles y que de ninguna forma afectan el tamaño del instalador (unos míseros 3,2 MB). actualmente Firefox está causando mucho ruido, el cual no es más que el más reciente alias para Mozilla. probé Mozilla hace una eternidad (varios meses atrás) así que no puedo hablar sobre las nuevas opciones que trae Firefox, pero mi fidelidad hacia Opera me mantiene completamente parcializado, utilizando para ello las opiniones de quienes sí los han probado a ambos.

para que no me llamen testarudo, prometo que lo probaré cuando llegue a la versión 1.0 y deje de cambiar de nombre más seguido que las instituciones gubernamentales en Venezuela (e.g. DIEX -> ONI-DEX -> DIEX -> ONIDEX).

2004-02-13@20:50